Publicado

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15/6/25

15/6/25

en

en

Alimentación

Comprendiendo la diabetes tipo 1 en niños

Comprendiendo la diabetes tipo 1 en niños

Autor

Autor

Dahlia Rimmon, RDN

Redactor de Contenidos

Revisado médicamente por

Revisado médicamente por

Dra. Marcy Borieux

Pediatra

Dr. Ali Alhassani, MD, FAAP

Experto en Pediatría y Entrenamiento del Sueño

cómo realizar pruebas para la diabetes infantil
cómo realizar pruebas para la diabetes infantil
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La diabetes tipo 1 es una de las enfermedades crónicas más comunes en niños. Es un trastorno autoinmune que típicamente se desarrolla en individuos genéticamente predispuestos durante la infancia. En este artículo, exploraremos cómo afecta a los niños, el proceso de diagnóstico y tratamiento, y estrategias prácticas para gestionar eficazmente el cuidado de la diabetes de su hijo.

¿Qué es la diabetes tipo 1?

La diabetes mellitus tipo 1 (DM1) es una condición autoinmune crónica en la que el cuerpo no puede producir suficiente insulina debido a la destrucción de las células beta productoras de insulina en el páncreas. Normalmente, la insulina ayuda a mover la glucosa (azúcar) del flujo sanguíneo a las células para ser utilizada como energía. Sin suficiente insulina, la glucosa se acumula en la sangre en lugar de ser utilizada por las células para la energía. Los niveles altos de azúcar en sangre pueden ser peligrosos y causar daño a largo plazo si no se manejan adecuadamente.

Los niños no nacen con diabetes mellitus tipo 1; la condición suele desarrollarse gradualmente con el tiempo. Aunque no se ha identificado un único desencadenante, se cree ampliamente que una combinación de predisposición genética y factores ambientales contribuyen a su aparición.

¿Por qué el cuerpo no puede producir suficiente insulina en la diabetes tipo 1?

En la DM1, el sistema inmunológico del cuerpo ataca erróneamente y destruye las células beta del páncreas, tratándolas como si fueran invasores dañinos. Con el tiempo, el cuerpo se vuelve incapaz de producir suficiente insulina para regular adecuadamente los niveles de azúcar en sangre.

Síntomas de la diabetes tipo 1 en niños

  • Micción frecuente (poliuria)

  • Aumento de la sed (polidipsia)

  • Aumento del apetito (polifagia) o períodos de hambre extrema

  • Fatiga 

  • Pérdida de peso 

  • Visión borrosa 

  • Deshidratación 

  • Irritabilidad

  • Dolores de cabeza 

En niños más pequeños, los síntomas de la DM1 pueden incluir mojar la cama o pañales muy pesados debido a la micción frecuente. Otro signo temprano puede ser infecciones por hongos recurrentes. Si no se trata, la DM1 puede progresar a una condición grave y potencialmente mortal llamada cetoacidosis diabética (CAD). Esto puede causar síntomas como:

  • Náuseas y vómitos

  • Debilidad o somnolencia

  • Latido cardíaco rápido

  • Dolor abdominal

  • Olor afrutado o similar al quitaesmalte en el aliento

  • Pérdida de conciencia

La CAD ocurre cuando el cuerpo no puede usar glucosa para obtener energía y comienza a descomponer la grasa en su lugar. Cuando el cuerpo descompone la grasa, produce cetonas, que proporcionan una fuente alternativa de energía pero son extremadamente ácidas. Cuando los niveles de cetonas se vuelven demasiado altos, pueden dañar el cuerpo. 

Diagnóstico de la diabetes tipo 1 en niños 

La diabetes tipo 1 (DM1) puede desarrollarse a cualquier edad, pero se diagnostica más comúnmente durante la infancia o adolescencia, típicamente entre las edades de 4 y 14, con un pico alrededor de los 10 a 14 años.

Para diagnosticar la DM1, su pediatra buscará síntomas comunes y medirá los niveles de azúcar en sangre de su hijo. Esto generalmente incluye:

  • Prueba de azúcar en sangre en ayunas: Mide el azúcar en sangre después de que su hijo no ha comido durante 8 a 12 horas.

  • Prueba de azúcar en sangre aleatoria: Mide el azúcar en sangre en cualquier momento del día, independientemente de cuándo comió por última vez su hijo.

  • Prueba de hemoglobina A1c (HbA1c): Mide los niveles promedio de azúcar en sangre de su hijo durante tres meses para evaluar el control de azúcar en sangre.

  • Prueba de orina: Detecta la presencia de cetonas, 

  • Prueba de autoanticuerpos en sangre: Identifica si el sistema inmunológico está atacando sus propias células productoras de insulina, para confirmar que se trata de un problema relacionado con el sistema inmunológico.

Aquí hay un desglose rápido de los valores de azúcar en sangre para determinar si el azúcar en sangre de su hijo está dentro de un rango saludable o si se necesita una evaluación adicional:

  • Azúcar en sangre en ayunas normal en niños: 99 mg/DL o menos 

  • Azúcar en sangre en ayunas anormal en niños: 126 mg/dL o más

  • Prueba de azúcar en sangre aleatoria normal: Menos de 200 mg/dL

  • Prueba de azúcar en sangre aleatoria anormal: 200 mg/dL o más 

  • Prueba de HbA1c normal: Menos del 5.7%

  • Prueba de HbA1c anormal: 6.5% o más

Factores de riesgo para desarrollar diabetes tipo 1

Varios factores pueden aumentar el riesgo de un niño de desarrollar diabetes tipo 1, incluyendo:

Curiosamente, los niños diagnosticados con DM1 generalmente tienen un familiar de primer grado con la misma, porque la susceptibilidad genética es un factor de riesgo importante. “Aunque la mayoría de los niños con diabetes tipo 1 no tienen antecedentes familiares, aquellos que sí tienen son más propensos a haber heredado una mayor carga de variantes genéticas de riesgo, y posiblemente exposiciones ambientales compartidas, que juntos aumentan su riesgo de desarrollar la enfermedad” explica Borieux. Y a diferencia de la diabetes tipo 2, no hay un vínculo fuerte con factores de estilo de vida como dieta o ejercicio.

Complicaciones de la diabetes tipo 1

Si no se trata o se gestiona mal, la diabetes tipo 1 (DM1) puede llevar a complicaciones graves y potencialmente mortales que afectan a múltiples órganos y sistemas en el cuerpo. Estas incluyen:

  • Retinopatía: Daño a los vasos sanguíneos en la retina, resultando en pérdida de visión. 

  • Nefropatía: Daño renal, que puede progresar a enfermedad renal crónica o insuficiencia renal.

  • Neuropatía: Daño nervioso. 

  • Cataratas: Opacidad del cristalino del ojo, que lleva a visión borrosa.

  • Gastroparesia: Vaciado gástrico retardado, que puede causar problemas digestivos. 

  • Hipertensión: Presión arterial alta. 

  • Enfermedad de las arterias coronarias: Estrechamiento de los vasos sanguíneos del corazón.

  • Enfermedad vascular periférica: Mala circulación en las extremidades, lo que puede resultar en amputaciones. 

Tratamiento de la diabetes tipo 1 en niños

Manejar la diabetes tipo 1 en niños requiere terapia de insulina de por vida, ya que sus cuerpos ya no pueden producir insulina por sí mismos. La insulina puede administrarse a través de múltiples inyecciones diarias con una pluma o jeringa de insulina, o una bomba de insulina que se lleva en el cuerpo para entregar insulina continua a través de la piel. La gestión también incluye:

  • Monitoreo frecuente de la glucosa en sangre para mantener los niveles de azúcar en sangre dentro del rango objetivo. Los niños pueden monitorear su sangre utilizando un medidor de glucosa, un dispositivo portátil que prueba una gota de sangre que se coloca en una tira y luego se inserta en el medidor para una lectura, o un monitor continuo de glucosa (MCG), un dispositivo portátil que utiliza un pequeño sensor para medir continuamente los niveles de glucosa.

  • Conteo de carbohidratos y terapia médica nutricional para equilibrar los azúcares de los alimentos con las necesidades de insulina. 

  • Apoyo psicosocial para ayudar a los niños y las familias a lidiar con los desafíos emocionales y sociales de vivir con diabetes.

  • Salud mental: Los niños con diabetes tipo 1 enfrentan desafíos emocionales y sociales significativos, incluyendo ansiedad y estrés, depresión, miedo a experimentar desequilibrios en el azúcar en sangre y aislamiento social. Por eso es tan importante ofrecer apoyo emocional y terapia profesional (si es necesario) para ayudarles a enfrentar y prosperar.

Se espera que los niños menores de 10 años no monitoreen ni gestionen independientemente su glucosa en sangre. A esta edad, el monitoreo de la glucosa en sangre es una responsabilidad del cuidador, ya que los niños pequeños carecen de la madurez cognitiva y física para autogestionarse.

Preguntas frecuentes

¿Con qué frecuencia tienen que ver a su médico los niños con diabetes tipo 1 para chequeos rutinarios?

Los niños con DM1 necesitan chequeos rutinarios cada tres meses con su equipo de atención de la diabetes, que incluye a su pediatra y endocrinólogo pediátrico. Las visitas pueden ser más frecuentes si hay problemas con el control del azúcar en sangre, la dieta o las complicaciones. 

¿La diabetes tipo 1 interrumpe significativamente la calidad de vida de los niños? 

“Sí, la diabetes tipo 1 puede afectar la calidad de vida debido a la administración diaria de insulina, el monitoreo frecuente de la glucosa en sangre, el riesgo de hipoglucemia e hiperglucemia, y el estrés psicosocial y la ansiedad que puede causar”, explica el Dr. Borieux. “También puede traer desafíos psicosociales, como el estigma social o sentirse diferente.” Sin embargo, con una atención médica integral, apoyo emocional y manejo efectivo de la diabetes, la mayoría de los niños con diabetes tipo 1 pueden llevar vidas activas y satisfactorias y participar plenamente en actividades adecuadas para su edad.

¿En qué se diferencia la diabetes tipo 1 de la diabetes tipo 2?

La DM1 es una enfermedad autoinmune con deficiencia absoluta de insulina y la diabetes tipo 2 es el resultado de resistencia a la insulina y deficiencia relativa de insulina. 

¿Los niños con diabetes tipo 1 necesitan revisar sus niveles de glucosa en sangre con frecuencia?

Los niños con DM1 necesitan monitorear su azúcar en sangre varias veces al día: antes de las comidas, a la hora de dormir, antes y después de la actividad física, y durante la noche si hay preocupaciones sobre bajos niveles de azúcar en sangre (hipoglucemia). 

¿Cuáles son algunos desafíos comunes que enfrentan los niños si tienen diabetes tipo 1?

  • Gestionar controles frecuentes de glucosa y dosificación de insulina

  • Miedo a la hipoglucemia

  • Seguir una dieta estricta

  • Coordinación con la escuela o guardería

  • Estigma social o ansiedad

  • Equilibrar el cuidado de la diabetes con el desarrollo normal y las actividades

¿Qué es la diabetes juvenil?

“La diabetes juvenil es un término más antiguo para la diabetes tipo 1 diagnosticada en niños y adolescentes,” explica el Dr. Borieux. “El término se usa menos hoy en día ya que la diabetes tipo 1 también puede ocurrir en adultos.”

¿Hay alguna manera de prevenir la diabetes tipo 1? 

Actualmente no hay manera de prevenir la DM1. “La investigación en curso está explorando posibles estrategias preventivas, pero ninguna ha sido confirmada como efectiva hasta la fecha,” dice el Dr. Borieux.

Si tiene preguntas sobre la diabetes tipo 1, comuníquese con su pediatra local o de Summer Health para obtener apoyo. Summer Health es una plataforma de telemedicina pediátrica que ofrece atención las 24 horas, brindando respuestas para todo, desde preocupaciones urgentes hasta preguntas cotidianas sobre la salud de su hijo. 

La diabetes tipo 1 es una de las enfermedades crónicas más comunes en niños. Es un trastorno autoinmune que típicamente se desarrolla en individuos genéticamente predispuestos durante la infancia. En este artículo, exploraremos cómo afecta a los niños, el proceso de diagnóstico y tratamiento, y estrategias prácticas para gestionar eficazmente el cuidado de la diabetes de su hijo.

¿Qué es la diabetes tipo 1?

La diabetes mellitus tipo 1 (DM1) es una condición autoinmune crónica en la que el cuerpo no puede producir suficiente insulina debido a la destrucción de las células beta productoras de insulina en el páncreas. Normalmente, la insulina ayuda a mover la glucosa (azúcar) del flujo sanguíneo a las células para ser utilizada como energía. Sin suficiente insulina, la glucosa se acumula en la sangre en lugar de ser utilizada por las células para la energía. Los niveles altos de azúcar en sangre pueden ser peligrosos y causar daño a largo plazo si no se manejan adecuadamente.

Los niños no nacen con diabetes mellitus tipo 1; la condición suele desarrollarse gradualmente con el tiempo. Aunque no se ha identificado un único desencadenante, se cree ampliamente que una combinación de predisposición genética y factores ambientales contribuyen a su aparición.

¿Por qué el cuerpo no puede producir suficiente insulina en la diabetes tipo 1?

En la DM1, el sistema inmunológico del cuerpo ataca erróneamente y destruye las células beta del páncreas, tratándolas como si fueran invasores dañinos. Con el tiempo, el cuerpo se vuelve incapaz de producir suficiente insulina para regular adecuadamente los niveles de azúcar en sangre.

Síntomas de la diabetes tipo 1 en niños

  • Micción frecuente (poliuria)

  • Aumento de la sed (polidipsia)

  • Aumento del apetito (polifagia) o períodos de hambre extrema

  • Fatiga 

  • Pérdida de peso 

  • Visión borrosa 

  • Deshidratación 

  • Irritabilidad

  • Dolores de cabeza 

En niños más pequeños, los síntomas de la DM1 pueden incluir mojar la cama o pañales muy pesados debido a la micción frecuente. Otro signo temprano puede ser infecciones por hongos recurrentes. Si no se trata, la DM1 puede progresar a una condición grave y potencialmente mortal llamada cetoacidosis diabética (CAD). Esto puede causar síntomas como:

  • Náuseas y vómitos

  • Debilidad o somnolencia

  • Latido cardíaco rápido

  • Dolor abdominal

  • Olor afrutado o similar al quitaesmalte en el aliento

  • Pérdida de conciencia

La CAD ocurre cuando el cuerpo no puede usar glucosa para obtener energía y comienza a descomponer la grasa en su lugar. Cuando el cuerpo descompone la grasa, produce cetonas, que proporcionan una fuente alternativa de energía pero son extremadamente ácidas. Cuando los niveles de cetonas se vuelven demasiado altos, pueden dañar el cuerpo. 

Diagnóstico de la diabetes tipo 1 en niños 

La diabetes tipo 1 (DM1) puede desarrollarse a cualquier edad, pero se diagnostica más comúnmente durante la infancia o adolescencia, típicamente entre las edades de 4 y 14, con un pico alrededor de los 10 a 14 años.

Para diagnosticar la DM1, su pediatra buscará síntomas comunes y medirá los niveles de azúcar en sangre de su hijo. Esto generalmente incluye:

  • Prueba de azúcar en sangre en ayunas: Mide el azúcar en sangre después de que su hijo no ha comido durante 8 a 12 horas.

  • Prueba de azúcar en sangre aleatoria: Mide el azúcar en sangre en cualquier momento del día, independientemente de cuándo comió por última vez su hijo.

  • Prueba de hemoglobina A1c (HbA1c): Mide los niveles promedio de azúcar en sangre de su hijo durante tres meses para evaluar el control de azúcar en sangre.

  • Prueba de orina: Detecta la presencia de cetonas, 

  • Prueba de autoanticuerpos en sangre: Identifica si el sistema inmunológico está atacando sus propias células productoras de insulina, para confirmar que se trata de un problema relacionado con el sistema inmunológico.

Aquí hay un desglose rápido de los valores de azúcar en sangre para determinar si el azúcar en sangre de su hijo está dentro de un rango saludable o si se necesita una evaluación adicional:

  • Azúcar en sangre en ayunas normal en niños: 99 mg/DL o menos 

  • Azúcar en sangre en ayunas anormal en niños: 126 mg/dL o más

  • Prueba de azúcar en sangre aleatoria normal: Menos de 200 mg/dL

  • Prueba de azúcar en sangre aleatoria anormal: 200 mg/dL o más 

  • Prueba de HbA1c normal: Menos del 5.7%

  • Prueba de HbA1c anormal: 6.5% o más

Factores de riesgo para desarrollar diabetes tipo 1

Varios factores pueden aumentar el riesgo de un niño de desarrollar diabetes tipo 1, incluyendo:

Curiosamente, los niños diagnosticados con DM1 generalmente tienen un familiar de primer grado con la misma, porque la susceptibilidad genética es un factor de riesgo importante. “Aunque la mayoría de los niños con diabetes tipo 1 no tienen antecedentes familiares, aquellos que sí tienen son más propensos a haber heredado una mayor carga de variantes genéticas de riesgo, y posiblemente exposiciones ambientales compartidas, que juntos aumentan su riesgo de desarrollar la enfermedad” explica Borieux. Y a diferencia de la diabetes tipo 2, no hay un vínculo fuerte con factores de estilo de vida como dieta o ejercicio.

Complicaciones de la diabetes tipo 1

Si no se trata o se gestiona mal, la diabetes tipo 1 (DM1) puede llevar a complicaciones graves y potencialmente mortales que afectan a múltiples órganos y sistemas en el cuerpo. Estas incluyen:

  • Retinopatía: Daño a los vasos sanguíneos en la retina, resultando en pérdida de visión. 

  • Nefropatía: Daño renal, que puede progresar a enfermedad renal crónica o insuficiencia renal.

  • Neuropatía: Daño nervioso. 

  • Cataratas: Opacidad del cristalino del ojo, que lleva a visión borrosa.

  • Gastroparesia: Vaciado gástrico retardado, que puede causar problemas digestivos. 

  • Hipertensión: Presión arterial alta. 

  • Enfermedad de las arterias coronarias: Estrechamiento de los vasos sanguíneos del corazón.

  • Enfermedad vascular periférica: Mala circulación en las extremidades, lo que puede resultar en amputaciones. 

Tratamiento de la diabetes tipo 1 en niños

Manejar la diabetes tipo 1 en niños requiere terapia de insulina de por vida, ya que sus cuerpos ya no pueden producir insulina por sí mismos. La insulina puede administrarse a través de múltiples inyecciones diarias con una pluma o jeringa de insulina, o una bomba de insulina que se lleva en el cuerpo para entregar insulina continua a través de la piel. La gestión también incluye:

  • Monitoreo frecuente de la glucosa en sangre para mantener los niveles de azúcar en sangre dentro del rango objetivo. Los niños pueden monitorear su sangre utilizando un medidor de glucosa, un dispositivo portátil que prueba una gota de sangre que se coloca en una tira y luego se inserta en el medidor para una lectura, o un monitor continuo de glucosa (MCG), un dispositivo portátil que utiliza un pequeño sensor para medir continuamente los niveles de glucosa.

  • Conteo de carbohidratos y terapia médica nutricional para equilibrar los azúcares de los alimentos con las necesidades de insulina. 

  • Apoyo psicosocial para ayudar a los niños y las familias a lidiar con los desafíos emocionales y sociales de vivir con diabetes.

  • Salud mental: Los niños con diabetes tipo 1 enfrentan desafíos emocionales y sociales significativos, incluyendo ansiedad y estrés, depresión, miedo a experimentar desequilibrios en el azúcar en sangre y aislamiento social. Por eso es tan importante ofrecer apoyo emocional y terapia profesional (si es necesario) para ayudarles a enfrentar y prosperar.

Se espera que los niños menores de 10 años no monitoreen ni gestionen independientemente su glucosa en sangre. A esta edad, el monitoreo de la glucosa en sangre es una responsabilidad del cuidador, ya que los niños pequeños carecen de la madurez cognitiva y física para autogestionarse.

Preguntas frecuentes

¿Con qué frecuencia tienen que ver a su médico los niños con diabetes tipo 1 para chequeos rutinarios?

Los niños con DM1 necesitan chequeos rutinarios cada tres meses con su equipo de atención de la diabetes, que incluye a su pediatra y endocrinólogo pediátrico. Las visitas pueden ser más frecuentes si hay problemas con el control del azúcar en sangre, la dieta o las complicaciones. 

¿La diabetes tipo 1 interrumpe significativamente la calidad de vida de los niños? 

“Sí, la diabetes tipo 1 puede afectar la calidad de vida debido a la administración diaria de insulina, el monitoreo frecuente de la glucosa en sangre, el riesgo de hipoglucemia e hiperglucemia, y el estrés psicosocial y la ansiedad que puede causar”, explica el Dr. Borieux. “También puede traer desafíos psicosociales, como el estigma social o sentirse diferente.” Sin embargo, con una atención médica integral, apoyo emocional y manejo efectivo de la diabetes, la mayoría de los niños con diabetes tipo 1 pueden llevar vidas activas y satisfactorias y participar plenamente en actividades adecuadas para su edad.

¿En qué se diferencia la diabetes tipo 1 de la diabetes tipo 2?

La DM1 es una enfermedad autoinmune con deficiencia absoluta de insulina y la diabetes tipo 2 es el resultado de resistencia a la insulina y deficiencia relativa de insulina. 

¿Los niños con diabetes tipo 1 necesitan revisar sus niveles de glucosa en sangre con frecuencia?

Los niños con DM1 necesitan monitorear su azúcar en sangre varias veces al día: antes de las comidas, a la hora de dormir, antes y después de la actividad física, y durante la noche si hay preocupaciones sobre bajos niveles de azúcar en sangre (hipoglucemia). 

¿Cuáles son algunos desafíos comunes que enfrentan los niños si tienen diabetes tipo 1?

  • Gestionar controles frecuentes de glucosa y dosificación de insulina

  • Miedo a la hipoglucemia

  • Seguir una dieta estricta

  • Coordinación con la escuela o guardería

  • Estigma social o ansiedad

  • Equilibrar el cuidado de la diabetes con el desarrollo normal y las actividades

¿Qué es la diabetes juvenil?

“La diabetes juvenil es un término más antiguo para la diabetes tipo 1 diagnosticada en niños y adolescentes,” explica el Dr. Borieux. “El término se usa menos hoy en día ya que la diabetes tipo 1 también puede ocurrir en adultos.”

¿Hay alguna manera de prevenir la diabetes tipo 1? 

Actualmente no hay manera de prevenir la DM1. “La investigación en curso está explorando posibles estrategias preventivas, pero ninguna ha sido confirmada como efectiva hasta la fecha,” dice el Dr. Borieux.

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Summer Health ofrece atención pediátrica urgente rápida y confiable a través de médicos en línea, todo por mensaje de texto. Ya sea que esté preocupado por la fiebre de su bebé, erupciones o cualquier otra preocupación de salud infantil, brindamos asesoramiento experto y apoyo en cualquier momento, directamente desde su teléfono.

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